La soledad no es tan mala como te han hecho creer

| Casi Creativos

Muchas veces nos podemos topar o pensar frases como ¿Puedo hacer esto sol@? ¿Qué pasará si nadie está ahí para mí? ¿Necesito a alguien más para sentirme bien?

Sin duda somos seres sociales, como sociedad todos tenemos un rol en ella, sin embargo, hoy te pregunto ¿Sabes estar contigo mismo? ¿En verdad te conoces? En sí, el problema no es la soledad, el problema es lo que tú te dices acerca de ella, cómo la encajas, cómo la interpretas y qué significado le das.

Por esto, debemos de desarrollar la capacidad de estar solos sin caer en emociones negativas, no es soledad ni aislamiento, hablamos de la soledad desde el punto de sumergirnos en nuestros pensamientos y emociones, descubrir lo que nos gusta, lo que no, lo que me molesta, lo que quiero cambiar en mi entorno y en mí.

Tú eres tú mejor compañía

Las personas que temen tanto a la soledad llegan a sentir que no son capaces de valerse por sí mismas, por lo cual,  desarrollan la necesidad de tener a alguien a su lado para poder sentirse felices y esto también es algo falso, ya que la realidad, esta realidad se vuelve una dependencia emocional.

Así que… ¡CUIDADO! Porque la dependencia emocional llega poco a poco hasta el punto de perder tu esencia como una persona individual, algunos signos de dependencia emocional pueden ser:

  • Dificultad para tomar decisiones.
  • Necesidad de agradar.
  • Necesidad de acceso al otro en todo momento.
  • Dejar de lado planes y metas a causa del miedo.
  • Sentimiento de vacío, culpa y preocupación.
  • Pánico al abandono o rechazo.

Por otra parte, esto es el resultado de una baja autoestima, falta de seguridad y confianza en uno mismo lo que nos hace estar angustiados. Por ejemplo, cuando una persona prefiere pasarlo mal con su pareja, amigos o compañeros por ese miedo intenso a quedarse solos

Pero esto es un grave error, pues aprender a estar solo es sumamente necesario para poder crecer y madurar psicológicamente, amar nuestra soledad y convertirnos en nuestro mejor amigo@, claro, es un aprendizaje que requiere de constancia pero es lo que nos hace ser personas independientes, maduras, conscientes y transformadas, una persona que sabe ser su propio espacio seguro.

Saber estar solos es darse cuenta de que, en realidad, tu mejor compañía eres túmismo y que gracias a ello, conectas con tu ser, confías en tus posibilidades y notas que eres capaz de andar por la vida solo.

Cada uno elige con quien ser feliz, y yo me elijo a mi

¿Cómo puedo conocerme?

El primer paso es cuestionarnos ¿Qué significa para mí la soledad?

Hay un foco rojo si pensamos que la soledad es algo terrible, que es peligroso estar solo y que por ti mismo no puedes valerte, en estos casos, debemos cambiar esas ideas irracionales por otras más racionales, más realistas.

Atrévete a debatir contigo mismo, busca pruebas a favor y en contra de esos pensamientos, analiza esos miedos y comprueba si tienes recursos o no para enfrentarlos y si realmente son tan malos. Este análisis te sorprenderá y verás que ese miedo, no es lo que parecía.

El segundo paso es tener una cita con nosotros mismos, para poder cambiar estos patrones, no solo debemos actuar a nivel mental, sino también a nivel conductual.

Elige un día, mientras desayunas o tienes un ratito libre y programa fines de semana contigo, con tu propia compañía y si quieres, puedes añadir algún pasatiempo o actividad favorita, pero sin redes sociales.

Ve por un café y siéntate a leer o ver algo de tu interés, sal a la playa o parque a caminar, ve por un helado de tu sabor favorito, pero hazlo solo. Cuando entrenes esto el suficiente tiempo, verás que has sobrevivido, que esos temores no eran reales y que te has encontrado con tu yo y ahora te conoces mejor.

El tercer paso es relacionarte con los demás, sí, aunque te sorprenda un poco, pero, la soledad no es sinónimo de aislamiento, la soledad es sinónimo de comodidad con nosotros mismos, de tranquilidad y de tiempo de calidad. Saber estar solo es fundamental para conocernos y relacionarnos con los demás, no lo olvides, la buena compañía con nosotros mismos es el soporte de nuestro bienestar.

Así que, organiza tu tiempo para también rodearte de gente, esto quiere decir que debemos de tomar tiempos para salir a compartir y convivir con las demás personas, ya que, esto mantendrá en un equilibrio sano en tu convivencia tanto individual como social.

Una manera efectiva de empezar con este cambio es sumar tiempo progresivamente, toma 15 minutos para ti por la mañana, por la tarde y por la noche, poco a poco ve incrementando este tiempo hasta que conformes una rutina donde realices tus responsabilidades, tengas tiempo para recrearte socialmente y también individualmente.

¡Te hará sentir mucho mejor! Espero que puedas reflexionar sobre este tema y ¡poner manos a la obra! Recuerda que invertir tiempo en nosotros es la mejor decisión.

Comentarios de facebook
Total
0
Shares
Compartir
Twittear
Compartir
Pin
Prev
Las brujas fueron en realidad las primeras feministas de la historia
| Casi Creativos

Las brujas fueron en realidad las primeras feministas de la historia

Las brujas fueron en realidad las primeras feministas de la historia

Next
¿Qué busca el feminismo actual si las mujeres ya “tienen derechos”?
| Casi Creativos

¿Qué busca el feminismo actual si las mujeres ya “tienen derechos”?

¿Qué buscamos las feministas?

Tal vez te pueda interesar
Total
0
Share