Recientemente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México tomó una decisión histórica al despenalizar el aborto en todo el país. Este fallo representa un avance significativo en el reconocimiento de los derechos reproductivos de las mujeres. Sin embargo, es fundamental entender que la despenalización no equivale a la legalización completa del aborto. A continuación, desmitificaremos algunos conceptos erróneos comunes que han surgido en torno a este tema.
Despenalización vs. Legalización: ¿Qué significa realmente?
El término “despenalización” significa que el aborto ya no se considerará un delito penal en el ámbito federal. En otras palabras, las mujeres ya no serán procesadas ni enfrentarán cargos penales por someterse a un aborto. De hecho, este fallo de la suprema corte significa que las mujeres o personas gestantes procesadas o sentenciadas por abortar deberán ser absueltas (esto si, de forma inmediata).
Sin embargo, esto no significa que el aborto sea “legal” en el sentido de que cualquier mujer pueda ir a cualquier hospital o clínica y solicitar un aborto sin más. Cada estado de México tiene la responsabilidad de adaptar sus leyes y reglamentos de acuerdo con la decisión de la Suprema Corte. Esto puede incluir la creación de protocolos médicos, establecimiento de criterios de elegibilidad, y otros procedimientos que deben seguirse.
¿Y entonces qué falta para que el aborto sea legal?
Aunque la decisión de la Suprema Corte es un hito crucial, todavía quedan varios pasos legislativos para que la despenalización sea efectiva en la práctica. El Congreso de la Unión tiene la tarea pendiente de modificar el Código Penal Federal para eliminar el delito de aborto. Actualmente, este delito está definido en el artículo 329 del Código Penal Federal como “la muerte del producto de la concepción en cualquier momento de la preñez”.
Este artículo contempla una pena de uno a tres años para las personas que “hagan abortar a una mujer”, incluso si la mujer da su consentimiento. Además, el código incluye inhabilitaciones de dos a cinco años para los médicos que practiquen un aborto.
No hay un tiempo límite o cronograma específico para que el Congreso realice estas modificaciones, aunque se espera que suceda a la brevedad posible dada la importancia y urgencia del tema. Este proceso legislativo es fundamental para que la despenalización del aborto se traduzca en un acceso seguro y reglamentado a los servicios de aborto en todo el país.
¿Qué significa la despenalización del aborto en México?
Como ya lo mencionamos antes, es importante destacar que la despenalización del aborto no equivale a su legalización total. En otras palabras, no puedes practicarte un aborto en cualquier hospital de manera inmediata. Sin embargo, la decisión de la Suprema Corte sí implica lo siguiente:
- Orden a legislar: La Suprema Corte ha instruido al Congreso a modificar la ley, específicamente para eliminar el delito de aborto del Código Penal Federal. Esto activa el proceso legislativo necesario para alinear las leyes existentes con esta nueva directriz legal.
- Precedente Judicial: Con esta decisión, se establece un precedente judicial que impide que cualquier juez en el futuro pueda condenar a una mujer por haberse sometido a un aborto.
- Absolución de mujeres en prisión: Las mujeres que se encuentren en prisión por haber realizado un aborto deben ser absueltas y liberadas, de acuerdo con el nuevo marco legal.
- Protección para los médicos: Ahora, ningún médico puede ser legalmente castigado por practicar un aborto. Esto elimina las sanciones previas que podían resultar en inhabilitaciones de dos a cinco años.
- Necesidad de un amparo: Aunque el aborto ha sido despenalizado, actualmente aún es necesario gestionar un amparo para poder acceder a un procedimiento de aborto. Esto se debe a que la implementación de las leyes y políticas de salud aún está en proceso a nivel estatal e institucional.
Un logro histórico con camino por recorrer
La decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en México de despenalizar el aborto representa, sin duda, un logro histórico en la lucha por los derechos reproductivos y la autonomía de las mujeres. Este fallo es un paso crucial que pone a México en la vanguardia de la región en lo que respecta a la progresión de los derechos reproductivos. Al eliminar las barreras legales que penalizan el aborto, se allana el camino para discusiones más amplias sobre el acceso a la atención de la salud para las mujeres, la educación sexual integral y la equidad de género.
Sin embargo, aunque esta despenalización es una victoria significativa, hay que entender que aún falta mucho camino por recorrer para que el aborto seguro, accesible y libre de estigma sea una realidad para todas las mujeres en México. Desde la modificación de leyes y políticas a nivel estatal hasta la implementación de protocolos médicos y programas de educación, existe una serie de medidas adicionales que deben tomarse para garantizar que la despenalización tenga un impacto tangible y positivo en la vida de las mujeres.
También será crucial mantener la presión pública y la vigilancia para asegurar que los legisladores y las autoridades pertinentes actúen rápidamente y de manera efectiva para implementar estos cambios. Solo entonces la despenalización del aborto se traducirá en un cambio real y duradero en la calidad de vida y la autonomía de las mujeres en México.
Así que sí, celebremos este logro histórico, pero permanezcamos conscientes y comprometidos con los pasos adicionales que aún deben darse para materializar plenamente este avance en derechos reproductivos.
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En conclusión…
La despenalización del aborto por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es un hito histórico en México que representa un avance significativo en la protección de los derechos reproductivos de las mujeres. Sin embargo, es fundamental entender que la despenalización no equivale a una legalización completa y automática del aborto en todo el país.
Aunque se ha establecido un precedente judicial importante, y se espera que las mujeres en prisión por abortos sean absueltas, todavía hay numerosos pasos legislativos y de implementación que deben seguirse para garantizar un acceso seguro y ético al aborto.
En resumen, aunque este es un momento para celebrar, también es un momento para reflexionar sobre el trabajo que aún queda por hacer. Debemos mantenernos informadas, activas y comprometidas para asegurar que este avance en derechos reproductivos se traduzca en cambios concretos y beneficiosos para todas las mujeres en México.
Si consideras que esta información es valiosa y contribuye a aclarar dudas y mitos en torno a la despenalización del aborto en México, te invitamos a compartir este artículo. La desinformación es una barrera para el progreso, y cada persona que se informa y comparte conocimiento contribuye a construir una sociedad más justa y equitativa.
